Mónaco es especial pero bajo la lluvia lo es más. Se trata de tirar los dados y ver qué resultado obtienes. Ayer Hamilton los lanzó y tuvo suerte.
Aunque un inicio de carrera bajo el coche de seguridad nunca es divertido, la seguridad es lo primero en ese dramático mundo de la Fórmula 1.
Ricciardo comandó la carrera con maestría durante los primeros compases de la prueba hasta que decidió entrar, como casi todos, a cambiar sus gomas a las intermedias. La cantidad de agua en pista se estaba reduciendo.
Hubo un piloto que no quiso seguir el guión, quiso mantenerse en pista: Lewis.
Continuó con neumáticos de lluvia extrema aunque la vista estaba seca en algunos sectores, estaba asumiendo un gran riesgo porque la salida del coche de seguridad habría mandado a la basura su estrategia.
Pero le salió bien por algo muy simple: Red Bull falló. La presión a la que fue sometido el equipo fue lo que quizá desencadenó un fallo que le privó al australiano de una victoria que sin duda se trabajó desde el sábado.
Los neumáticos no estaban preparados, ¿cómo puede una escudería tan grande cometer fallos así?, todos los cometen, nadie escapa a los errores.
Por tan sólo unas décimas de segundo salió Daniel por detrás del inglés pero eso le condenó y ya no pudo pasarle. Estaba muy frustrado porque seguro que se había visto ganador de la prueba monegasca desde que firmara el sábado por la tarde la pole.
Sin duda el ritmo que imprimió en las primeras vueltas fue rápido pero la distancia con el segundo, Nico, estuvo condicionada porque el alemán sufrió algún tipo de problema que le retrasó tanto que tuvo que ceder su puesto a su compañero. Además, en su parada en boxes encontró tráfico y cuando salió a pista, se encontró rodando 6º.
Su compañero no sufrió el problema del tráfico e imprimió un ritmo mucho mayor.
Se llevó una inesperada victoria que se trabajó tanto como Ricciardo y se hizo todo lo ancho que pudo para evitar que el australiano le robara la victoria.
No fue sencillo pero de esta forma Hamilton se reencuentra con la victoria, algo que no hacía desde Estados Unidos el año pasado, pista donde se proclamó tricampeón del mundo.
Pero la carrera tuvo más golpes inesperados: un abandono temprano de Raikkonen, quien en Loews no pudo frenar el coche y descolgó su alerón delantero. Se vio obligado a aparcar el coche por seguridad tras la chicane del túnel.
El otro Ferrari, Vettel, no tuvo una buena carrera, rodó con tráfico y tampoco debió encontrarse cómodo tras finalizar en una cuarta posición que le sabrá a poco después de finalizar segundo el año pasado pero más todavía después de ver cómo está sufriendo la Scuderia este año entre unas cosas y otras.
Verstappen, que no tuvo un gran fin de semana, terminó de estropearlo con un golpe en Massenet, poniendo fin a un fin de semana complicado.
Magnussen chocó frontalmente en las protecciones de Mirabeau. Si hubiera seguido de frente por la escapatoria y después hubiera retornado a la pista, probablemente no habría dañado su coche.
Los Williams no tuvieron una gran carrera, no pudieron rodar en un ritmo que les permitiera hacer mucho más de lo que hicieron. No era la mejor pista para ellos y menos aún con suelo mojado, situación en la que se diluyen completamente. Sólo cogieron un punto con Massa.
Un magnífico Sergio Pérez que partía 7º supo gestionar la carrera y los cambios de neumáticos para aguantar en posición de podio hasta el final. Aprovechó además la dureza para adelantar en Montecarlo para mantener la posición con Vettel y alcanzó el sexto podio de su carrera deportiva.
Su compañero acabó 6º tras adelantar en la recta de meta al final de la última vuelta a Rosberg pero eso no quita el hecho de que su compañero lo esté haciendo notablemente mejor que él.
Una quinta posición relativamente positiva para Fernando, un gran resultado pero ese Mclaren no está donde debería estar, ya que gracias a infortunios de los demás alcanzó esa posición.
Por lo visto a Mclaren-Honda le queda más de lo que parece por delante para tener un coche competitivo y todos esperábamos algo más del coche quizá en este circuito a pesar de la meritoria quinta posición. Un bálsamo, de todas formas, en una carrera difícil en un período complicado para el piloto asturiano, cuya fe y paciencia son sus armas.
Su compañero finalizó en una modesta 9ª posición, firmando otra carrera doble en los puntos para Woking.
Una auténtica pena la 8ª posición de Carlos Sainz, principalmente después de pensar que podría haber estado en el podio ya que estuvo por delante de Checo parte de la carrera.
Cuando sus mecánicos fallaron en el pit-stop, como pasó con la hermana mayor, mandaron al traste las opciones de un gran resultado, una vez más. Su compañero Kvyat abandonó.
No tuvo una gran carrera Haas con Gutiérrez 11º, rozando los puntos y Grosjean acabó 13º. En Canadá quizá tengan más suerte en un circuito donde un buen motor puede dar garantías de puntos.
Los dos Manor cerraron la clasificación primero con Pascal, penalizado severamente por ignorar banderas azules y por exceder la velocidad permitida durante el coche de seguridad virtual; el último que cruzó la meta fue Haryanto.
Uno de los episodios más negativos de la prueba lo protagonizó Sauber cuando le comunicaron a Nasr que dejara pasar a Marcus para que intentara un adelantamiento.
El sueco se precipitó en la Rascasse y ambos monoplazas se tocaron. Posteriormente abandonaron los dos, finalizando de la peor manera posible el fin de semana para un equipo con problemas financieros.
La ruleta de Mónaco sonrió esta vez a Lewis, quien, no nos engañemos, necesitaba ganar ya. Probablemente estaba preocupado por que no sabía cuando iba a llegar la victoria.
Nico no tuvo un gran domingo, la suerte se reparte a lo largo del año y quedan muchas carreras.
Terrible el resultado final para Ricciardo teniendo en cuenta sus aspiraciones desde el inicio. Ha sufrido este año otras veces cuando iba en posiciones muy buenas y es una auténtica pena para él.
Una prueba marcada por la inesperada resistencia del neumático más blando. En concreto, el ganador de la prueba, fue capaz de rodar 45/78 vueltas con el ultrablando cuando su nombre indica que esto no debería ser posible.
Al comienzo el nivel de grip era bajo pero conforme se fue secando la pista los pilotos ganaron confianza y empezaron a rodar más rápido.
La siguiente prueba es Canadá, segunda casa de Hamilton, ha ganado tres veces en la isla de Notre Dame.
El motor allí es importante por lo que Mercedes tendrá o debería tener la sartén por el mango de nuevo. Ferrari no tendría que andar lejos y sin duda será interesante ver donde coloca a Red Bull la actualización de su motor.
¿Será capaz de alargar Hamilton su recién comenzada andadura en la victoria este año?, ¿mostrará algún signo de mejoría Ferrari tras un inicio más que complicado?, ¿podrá Red Bull tener algo que decir en Canadá?
¿Logrará Force India consolidar una posición decente en el Gilles Villeneuve? y sobre todo, por los intereses de los españoles, ¿dará Honda un salto de calidad significativo en el primer circuito del período que ellos mismos señalaron como el de crecimiento del motor?
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