El año pasado el circuito de Spielberg presenció un dominio incontestable de los coches de Mercedes seguidos por unos indecisos Williams, que por culpa del conformismo con el podio no ganaron la carrera.
Los jugadores locales, el equipo Red Bull, lo pasó mal con un abandono de Vettel, que sufrió problemas prematuros y se vio envuelto en algún accidente, finalmente abandonó la carrera.
Este año el equipo de las bebidas energéticas no llega especialmente recuperado, de hecho, llega peor que en 2014, con muchos problemas de motor y evidentemente otros problemas con raíces más profundas.
Pero Mercedes sigue siendo el rival a batir, en medio de muchas dudas, debates y fuego cruzado entre unos personajes y otros dentro de la Fórmula 1. Este deporte está patas arriba.
Recientemente es sabido que Michelin tratará de entrar en la F1 en 2017 para amenizar la situación y aportar algo de estabilidad a la guerra de los neumáticos. Pirelli está cansada de que se critiquen sus neumáticos, si no son demasiado blandos y se degradan rápido, no hay quien los caliente (en algunos casos) o plantean carreras con estrategias aburridas.
También tenemos una guerra de motores y si la solución no agrada al motorista francés Renault, se irá de la F1. Consideran que la reglamentación ni tiene sentido ni es sostenible y no es compatible con sus planes de futuro por lo que darán puerta a este deporte.
También relacionado con motores está la idea de incrementar su potencia para 2017, dentro de un marco reglamentario muy distinto que pretende cambiar el orden de la parrilla, por lo que adaptarse desde este mismo instante a dichas variaciones será primordial.
Neumáticos más anchos, cambios en la aerodinámica, en el diseño visual de los morros son algunos de los cambios que podrían venir para dentro de menos de dos años.
También conocemos la situación de Haas, que os recuerdo, es el nuevo equipo que estará en la parrilla en 2016. Gene Haas, su propietario, ha apostado fuerte por un proyecto que según lo que se lee, va bien. Están en proceso de construcción del chasis y pronto vendrá la carrocería.
Su objetivo primordial es estar en los primeros test de pretemporada, puedes entienden la importancia de los mismos para avanzar y mejorar.
Y hablando de más equipos, nos pasamos a los que compiten este año, seguimos con Mercedes.
Hamilton demostró mucha solidez en Canadá, su circuito y no dejó ninguna opción a Nico Rosberg. Este es el Hamilton que ganará el mundial, el que hemos visto en casi todas las carreras de este año. El alemán tiene que trabajar bastante todavía si quiere batir a su compañero. Necesita esas vueltas mágicas que le permitan estar por delante de Lewis y taponarlo en carrera.
¿Ferrari está estancada?, ¿ya no pueden seguir el ritmo de Mercedes?, siguen siendo los segundos de la parrilla, como lo fueron durante los campeonatos de Sebastian, ¿Alonso tenía razón entonces?, "me fui porque veía que iba a seguir siendo segundo, yo quiero ganar, con Mclaren-Honda es posible".
Nos acercamos a la mitad de la temporada y la diferencia no ha decrecido demasiado, es más, cada vez que alguien se acerca o eso parece al equipo líder, este saca algo y se distancia otra vez, decía Flavio. Complicado.
Williams en Canadá demostró ser sólida aunque aún le falta para llegar al nivel de Ferrari, en un circuito de motor sacó a relucir el potencial del motor germano pero eso no será suficiente. Deben mejorar, llegan piezas próximamente y los de Grove deben meter toda la carne en el asador.
Red Bull y Renault, la crisis de confianza, capítulo a parte. Lo digo porque estos dos conjuntos tienen un problema que merece un capítulo sólo para ellos. Renault dice que no puede trabajar si nadie le apoya, cada vez que resuelven algo, aparecen más problemas y Red Bull les critica, dicen que hasta los fans.
Cyril Abiteboul advierte de que la confianza en lo que hacen es básico para construir un motor ganador, como ya hicieran antaño y que deben tener el camino idóneo para hacerlo. No sé como acabará esta pareja a final de año.
El morro corto de Woking ya ha recibido el "ok" de la FIA por lo que podrán probarlo en Austria, ¿pero será suficiente?, yo creo que no, esos problemas de fiabilidad son el verdadero freno al avance de Mclaren.
Hasta que los resuelvan no podrán avanzar y están a punto de penalizar aunque Alonso comentaba "no me importaría comenzar cada carrera del pit-lane si eso significa que mejoramos", confianza absoluta en el proyecto.
Este fin de semana tampoco representará uno bueno en el calendario porque Spielberg demanda motor y el circuito es corto así que tendrán que vérselas para afrontar sus problemas... y para terminar la carrera.
Tampoco será un gran fin de semana para Carlos, Max ni Franz Tost por ese maldito motor que no funciona correctamente. Deberán apurar un buen set up el viernes y sábado, salir lo más adelante posible y controlar la carrera.
Lotus-Mercedes debería alcanzar el nivel de Canadá. En el circuito Gilles Villeneuve de Montréal lo hicieron bien aunque cedieron varias posiciones, no estaría mal repetir un resultado similar dentro de unos días.
Force India y Sauber, dos equipos que andan perdidos. Comenzaron de manera aceptable pero se diluyeron en seguida, ni si quiera hemos alcanzado la mitad del campeonato y es evidente que no mejoran de una forma regular.
Ya sea por deudas, por actualizaciones que no funcionan o por las razones que sean, Pérez saca a relucir el VJM08 de vez en cuando y eso sólo le sirve a él como piloto y al equipo, claro.
Podrían puntuar este fin de semana pero no veo claro un gran resultado de los de Vijay Mallya. Los de Monisha Kalterborn no cogen ni las migajas.
Manor, que tiene que mejorar su coche y permitir que sus pilotos disfruten batallando en el desnivelado circuito austríaco.
¿Qué creéis que pasará en clasificación?, ¿logrará Rosberg la pole y conseguirá la tercera victoria de la temporada o hablo demasiado alto?, sólo hay que esperar tres días para verlo.
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